Convertirte en el perro alfa significa convertirte
en el líder de tu perro. Eso no significa que has de maltratar al perro.
Significa ser el mejor amigo y guía de tu perro.
Los perros necesitan sentirse seguros dentro del
grupo al que pertenecen (en tu caso, tu familia ). Para esto, necesitan saber
que existe un líder capaz de guiar al grupo y resolver los problemas que se
presenten.
Si tu perro no está seguro de quién es el líder de
su entorno social, tratará de ocupar ese puesto. Esta es una de las peores
cosas que le podrían suceder, un perro no podrá manejar las situaciones del
mundo en que vive: un mundo humano. Si esto sucede sentirá miedo y frustración
al verse incapaz y empezarán los problemas de comportamiento.
La agresión es uno de los problemas más frecuentes
y graves que presentan los perros que no tienen claro que "sus
humanos" son los líderes.
Todo lo que tienes que hacer para convertirte en el
perro alfa está relacionado con la conducta social innata del perro.
Para conseguirlo :
Camina erguido. Gran
parte del liderazgo se consigue con el lenguaje corporal correcto. Si te ves
débil o abatido, tu perro pensará que no eres digno del liderazgo.
Camina con una postura erguida y segura, y mantén
tu cabeza y tu mirada por encima de las de tu perro.
Haz contacto visual. En lenguaje de perros, el contacto visual es una señal de dominancia y
superioridad.
Aunque no debes hacer esto con todos los perros que
conoces, sí es importante que lo hagas con tu perro. No sólo para demostrarle
que eres un líder seguro y confiable, sino también para que él aprenda que el
contacto visual con humanos no es una señal de amenaza.

Mantén silencio. Un
líder respetable sólo habla cuando tiene algo importante que decir. Felicitar
constantemente a tu perro sólo hará que tus felicitaciones dejen de tener
sentido para él. Igual ocurrirá si lo riñes constantemente, las reprimendas
dejarán de surtir efecto después de un tiempo.
Háblale con autoridad. Tu voz tiene que mostrar autoridad y ser coherente con el lenguaje
corporal que usas. Cuando des una orden, usa una palabra corta y pronúnciala
con firmeza y decisión ( esto no significa chillar ), no grites las órdenes.
Si elevas la voz para dar órdenes, no te servirá
para nada, lo único que hará, es hacer pensar a tu perro que estás inseguro
sobre tu liderazgo.
Para felicitar a tu perro usa una voz más suave,
pero igual de decidida, Hazle saber a tu perro cuando estás contento.
Cree en ti mismo. Cuando
interactúes con tu perro, tienes que resultarle convincente. Él se dará cuenta
si tú no crees tener la autoridad para liderarlo.
Aliméntalo. Es importante
que tu perro te vea como el proveedor de la comida. El no sabe que tú eres
quien la paga, pero ha de verte como el que la trae a casa.
No hay que dejar su bol con comida durante todo el
día para que pueda alimentarse cuando él quiera. Has de establecer unos
horarios para comer y retirarle el plato tanto si ha acabado como si no a los
15 minutos de servirlo. Cada vez que él te vea poner el recipiente con comida
en su lugar, estarás reforzando tu posición de líder.
Es bueno que tu perro reciba su comida de todas las personas de la casa
(padre, madre, hijos, etc.). Así, empezará a darse cuenta que todas esas
personas son jerárquicamente superiores.
No le lances comida al suelo. Si has de darle algo
fuera de sus horarios dáselo directamente de tu mano. Tampoco le permitas comer
de manos extrañas.
Come antes que él. En una
jauría, los integrantes de mayor jerarquía comen antes que los subordinados.
Así que asegúrate que tu perro te vea comer justo antes de darle su comida.
El derecho de paso es tuyo. Si tu perro está en medio de tu camino, muévelo. Hazlo a un lado sin
violencia y continúa caminando.
Cuando tengas que pasar con tu perro por lugares
estrechos (una puerta, las escaleras, un pasillo angosto, etc.) tú tienes que
pasar primero. Al principio, simplemente sujeta a tu perro por el collar para
que espere mientras pasas.
Cuando tu perro ya conozca la orden de sentarse, o
la de quieto podrás dásela hasta que tú pases.
Ignóralo cuando llegas. Tu perro se pondrá loco de alegría cada vez que te reencuentres con él,
incluso si la separación ha sido corta. Si lo saludas efusivamente, le estarás
diciendo "eres lo más importante del mundo, haz lo que te dé la
gana".
Para reforzar tu jerarquía, y la de tu familia,
ignóralo hasta que se calme. Mientras tanto, saluda a todos los demás miembros
de tu familia (y que tu perro te vea hacerlo). Saluda a tu perro el ultimo y
siempre que este calmado.
Controla los juguetes. Tu perro necesita tener algunos juguetes disponibles todo el tiempo.
Sin embargo, tienes que guardar algunos juguetes
especiales para usarlos solamente cuando tú inicies un juego. Una vez que hayas
terminado el juego, recoge esos juguetes y guárdalos.
Nada es gratis, el perro ha de trabajar para
obtener lo que quiere. Tu perro tiene que ganarse la comida, los juegos,
las caricias, etc. Esto no tiene porqué ser algo complicado. Simplemente, haz
que se siente o acuda a tu llamada antes de empezar a jugar, darle la comida,
etc.
No permitas que tu perro sea quien decida por dónde
y a qué velocidad habéis de ir. No tienes que dejar que tu perro estire de la correa, enseñale a no hacerlo.
Proporciónale a tu perro mucha atención, ejercicios
y juegos. Esto no es un ejercicio de liderazgo, pero no
podrás controlar un perro aburrido que necesita mucho ejercicio y juegos. Así
que, proporciónale a tu perro el ejercicio que necesita.
Resumiendo, recuerda todo lo leído y haz cotidianas
estas 5 pautas
PAUTAS JERÁRQUICAS
Estas se deberían aplicar a todos los perros
independientemente de la raza o tamaño del animal y sirven para toda la vida.
1- Cuando salgas por la puerta de la calle asegúrate de que tú sales en primer lugar. ( un perro alfa, siempre va por delante )
2- Cuando vuelvas a casa ignora por completo al perro hasta que se calme, ni lo mires, ni le hables ni le toques; una vez calmado esperas 5 minutos , lo llamas y juegas con él. ( un perro alfa, siempre es él quien decide cuando quiere jugar. )
3- Cuando le vayas a dar la comida prepárala encima del mármol de la cocina y prepara también un trozo de pan, una galleta o lo que te apetezca, es simbólico, una vez tengas todo preparado y el perro te esté observando cómete esa galleta y hasta que no acabes por completo no le des su comida. Pasados 10-15 minutos si no se la ha comido se la quitas y no se la des hasta que le vuelva a tocar y sigue el mismo ritual. ( un perro alfa, siempre come primero y deja lo que sobra para los demás )
4- Debes ser tú quien que lleve al perro de paseo, no el a ti. ( el perro alfa siempre va por delante )
5- Cuando haga algo que no te guste ignóralo por completo, si se hace pis o caca en casa, o si al llegar a casa te encuentras el estropicio mas grande jamás visto, no le digas nada al perro y no lo recojas en su presencia.
1- Cuando salgas por la puerta de la calle asegúrate de que tú sales en primer lugar. ( un perro alfa, siempre va por delante )
2- Cuando vuelvas a casa ignora por completo al perro hasta que se calme, ni lo mires, ni le hables ni le toques; una vez calmado esperas 5 minutos , lo llamas y juegas con él. ( un perro alfa, siempre es él quien decide cuando quiere jugar. )
3- Cuando le vayas a dar la comida prepárala encima del mármol de la cocina y prepara también un trozo de pan, una galleta o lo que te apetezca, es simbólico, una vez tengas todo preparado y el perro te esté observando cómete esa galleta y hasta que no acabes por completo no le des su comida. Pasados 10-15 minutos si no se la ha comido se la quitas y no se la des hasta que le vuelva a tocar y sigue el mismo ritual. ( un perro alfa, siempre come primero y deja lo que sobra para los demás )
4- Debes ser tú quien que lleve al perro de paseo, no el a ti. ( el perro alfa siempre va por delante )
5- Cuando haga algo que no te guste ignóralo por completo, si se hace pis o caca en casa, o si al llegar a casa te encuentras el estropicio mas grande jamás visto, no le digas nada al perro y no lo recojas en su presencia.
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